Ejemplo: En el año 2002 tuvimos que hacer un "portaplanos personalizado" para alguno de nuestros compañeros de la clase de Composición. Mi compañero, al que me tocó estudiar, le gustaban los rompecabezas, los colores tales y no sé que más. Así que para sacar 90 me lancé a la tienda de regalos más cercana -no por ello la más barata- y zas! le compré un rompecabezas equis, bueno era de Aladino.
La idea que se se me había ocurrido era pintar algunas piezas de los colores que le gustaban al chiavo y pegar algunas en el tubo portaplanos. So, I did it. Armé el rompecabezas una y otra vez y cuando ya casi amanecía terminé el portaplanos o algo así. El chiste es que, esa cajita tan insignificante la guardé durante todo este tiempo (7 años) porque estaba a todo dar para guardar chunches, que las cuerdas de la guitarra, que los adaptadores de audífonos, plumillas, parches de mochila, etc.
Luego un día de ocio terapéutico y productivo encontré pinceles viejos, pedí unos prestados y me puse a pintar así nomás... de purititas ganas. Me dí cuenta que me gustaba pintar nada en concreto. Me gusta mucho mezclar colores sin algún patrón fijo o límites. Así que de repente me hallé myself pintando cajitas de cartón con pintura acrílica.
Me encontré una caja de cartón blanca, la textura era como de foamboard.. pero brillante, como un papel doblecara, y ya, la pintura se portó muy bien y todo. Luego me encontré la cajita de Aladino, tenía tanto tiempo por ahí arrumbada que ni me había dado cuenta de unos agujeros que alguien le hizo. No le dí importancia y la pinté de blanco y me dispuse a brochearle encima.
ole estan re buena onda lastima q yo soi demasiado rosa jajaj
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